¡Viva La Pepa!, crítica teatral
06 Jul 2021
Allí donde un continente se acaba y otro se convierte en paisaje del uno, en el límite en el que lo fronterizo es forma de vida, dónde la fusión y el mestizaje son esencia y lo diferente se convierte en prueba empírica de igualdad; exactamente en Melilla, ciudad española ubicada en el norte del continente africano, poblada por algo menos de 87.000 habitantes, extendida en una superficie de 12 kilómetros cuadrados, enmarcada entre el mar de Alborán (parte más occidental del mar Mediterráneo) y Marruecos, se ubica la historia del personaje creado por la dramaturgia de Juan Luis Iborra y Sonia Gómez, para protagonizar, en forma de monólogo, el espectáculo “¡Viva La Pepa!”.
“¡No tengo yo el coño para llantos!”
Y como la tierra que acoge a Pepa, su vida está llena de límites y de fronteras, y de ello nos habla y nos comparte, pero con el gran recurso del sentido del humor y la sorna. También hay, por supuesto, crítica social, poniendo el dedo en la llaga de nuestra clase política, para cuyos integrantes solo existe un problema: el próximo proceso electoral, sea municipal, autonómico, nacional …o simplemente los relativos a sus respectivos congresos de sus propios partidos políticos.
“A mi no me sobran kilos, me sobran litros, es que retengo mucho”
“Solo pierde quien desea algo con ansiedad”
Critica social desde el juego de lo absurdo, poniendo el foco en el usar y tirar que no solo alcanza a las cosas materiales, sino especialmente a las personas, sea por parte de los políticos que prometen todo para no cumplir nada, o de los programas de televisión que se alimentan de la carroña de los propios personajes que ellos mismos crean. Todo en ello clave de comedia.
La actriz gaditana Pepa Rus defiende con eficacia y soltura este monólogo de setenta y cinco minutos que, a parte de hacer brotar carcajadas en momentos determinados, es capaz de destilar el buenrollista mensaje de que por muchas penas y amarguras que se arrastren, nunca hay que perder la positividad y las ganas de reír.
Monólogo que engancha desde el minuto uno. Trata temas en clave de humor ej.monarquia ,de una manera «ejemplar_ blanca «.
No se hace pesada y la puesta en escena es sencilla pero efectiva.
La recomiendo!!!
Muchas gracias, Cristina, por su comentario y participación en https://www.traslamascara.com al hilo de la crítica teatral que hemos publicado respecto al espectáculo «¡Viva La Pepa!», con el cual coincidimos. Esperamos seguir contando con sus visitas y aportaciones. Saludos.