Teatro, la política es puro teatro
02 Nov 2017
Al militante político se le ha convertido en «forofo».
Una de las grandes diferencias de la política del momento actual y otros momentos de la historia, es que hoy no es tan importante lo que se hace, como el mensaje que se traslada sobre ello, y como se “venden” las decisiones, no ya para el neutral, sino para el propio seguidor, lo cual es aún más complicado, pues al militante se le ha convertido en “forofo”, no dando espacio para intercambiar argumentos, sino solamente para que el fanático pueda jalear y cantar los “goles” de sus colores, o los “penaltis” no pitados al rival.
¿Alguien se imagina a Felipe II pendiente de lo que se podría pensar sobre una decisión de su gobierno?, o simplemente pensemos si sería posible hoy una reunión a puerta cerrada entre dos líderes políticos, sin nadie presente, como la que mantuvieron Adolfo Suárez y Santiago Carrillo el 27 de febrero de 1977, durante las cinco horas en las que se pactó la legalización del PCE en un ambiente social político de gran complejidad, o la que el mismo Suárez mantuvo con Tarradellas, unos días antes de la famosa, por conocida, también en 1977, en la que éste, al salir, a pesar de haber transcurrido muy tensa y fría, dijo: “…una conversación con el presidente Suárez siempre es efectiva”.
¿Sería posible hoy una reunión secreta entre dos líderes políticos?.
El pasado veintisiete de octubre se culminó un proceso, entre Carles Puigdemont y Mariano Rajoy, que se ha extendido desde el ocho de septiembre con la aprobación, por el Parlament de Cataluña, de la conocida como “ley de desconexión con España”, en la que lo importante parecía no ser lo que hacía cada uno, o los bandos que representaban, sino la expectativa de lo que cada uno pudiera hacer sobre lo que el otro hiciera; llegando al paroxismo de que ese día coincidieron dos plenos, el del Senado de España para aprobar, presuntamente, el desarrollo del artículo 155 de la Constitución Española, y el del Parlament de Cataluña para, también presuntamente, proclamar la “Declaración Unilateral de Independencia”, y concluir a que poco antes de las 16 horas sucediera eso en Barcelona, y una hora mas tarde se aprobase la aplicación del artículo 155, desde Madrid.
Más el ripio final de que todo ello coincidiera en viernes, con lo cual los protagonistas, unos y otros, han disfrutado del fin de semana para maniobrar y escenificar el espectáculo que tienen decidido ofrecernos, estrenándolo este lunes laboral.
Este lunes laboral se estrenó el espectáculo incubado, desde el 27-O, durante el fin de semana.
¿Alguien puede pensar que el desenlace de ese viernes frenético no estuvo pactado entre representantes de ambas posiciones?.
Hagamos un breve resumen de los hechos:
1) Veamos, había coincidencia general en que la salida a la situación creada pasaba por unas elecciones en Cataluña; de hecho Carles Puigdemont estuvo valorando convocarlas él directamente para el 20-D, pero el mayor problema radicaba en como “venderlo” dentro de las filas del independentismo (JxSI y CUP), a cuyo rumor la calle fue un clamor el jueves, veintiséis de octubre, al grito de “botifler”, y traidor, dirigido al president.
2) Coincidencias del “posibilísimo» resulta que Rajoy, con la ratificación del Senado, aplica el artículo 155, y convoca elecciones en Cataluña tan solo un día más tarde de lo que barajaba Carles Puigdemont (21-D).
3) Tanto uno como otro logran un margen temporal para que sus propios se explayen, muestren sus banderas por las calles, unos gritando ¡viva la república catalana!, y los otros jaleando los efectos de una cierta sensación de recuperación del control por parte del Estado.
Los «propios», de unos y otros, tuvieron su margen temporal para explayarse.
4) Los miembros del gobierno catalán que han sido cesados de sus funciones, desde el propio Puigdemont, al responsable de la oficina diplomática en Bruselas, aceptan sus nuevos roles, filtrándose la decisión de que tanto PDeCAT, com ERC, participarán en las elecciones del 21-D.
5) Carme Forcadell admite que el Parlament está disuelto y que solo se mantiene activa su comisión permanente, compuesta por veintitrés miembros.
6) Oriol Junqueras escribe un articulo en prensa, claramente dirigido a sus propios, en el que incluye el mensaje de: “…los próximos días tendremos que tomar decisiones y no siempre serán fáciles de entender”.
«…los próximos días tendremos que tomar decisiones y no siempre serán fáciles de entender».
7) Desde Bélgica se emite un comunicado por el cual se muestran partidarios de conceder asilo político a Carles Puigdemont, y este lunes, 30 de octubre, sin haber pasado por su despacho de president de la Generalitat de Cataluña, se filtra que éste, está en Bruselas.
Creo poco, más bien nada, en las casualidades y la observación de estos pocos hechos parecen corroborar que, más allá de las razones de unos y otros, todo lo que nuestros ojos están presenciando, y no solo desde el veintisiete de octubre, se corresponde con pasos consensuados, desde los dos extremos de la linea del AVE entre Madrid y Barcelona.
¡Ah! …alguien me podría decir que se van a presentar demandas por rebelión y sedición, por supuesto; pero empezará la campaña electoral, habrá elecciones el 21-D y comenzará a repetirse el argumento de que la responsabilidad de los políticos se depura en las urnas y cosas así. Mientras tanto seguiremos presenciando el espectáculo, porque …¡teatro, la política es puro teatro!.