De error en error hasta traslucir la verdad
04 Mar 2025
Ningún cargo político, tampoco empresarial ni social, dura para siempre, pero a Carlos Mazón ya se le ha puesto cara de ex-presidente de la Comunidad Valenciana, y no hoy, ni ayer. Lo luce hace semanas, incluso meses. Su rostro expresa lo que niega con la boca, y lo que sabe todo el conjunto de los conciudadanos de la comunidad autónoma que aún preside, además de la sociedad española en general.
¿Qué más cosas tendrían que ocurrir para que la primera autoridad autonómica, representante del Estado en la Comunidad de Valencia, estuviera, presente, al mando de la gestión de la crisis?.
Las consecuencias de lo vivido el 29 de octubre del pasado año, hace escasamente cuatro meses, cuando una riada generada por una DANA (depresión aislada en niveles altos), arrasó 75 municipios de la provincia de Valencia, además de Letur (Albacete) y Mira (Cuenca), tuvo su más aterradora expresión en el número de víctimas mortales contabilizadas, que alcanzan la cifra de doscientas veinticuatro personas (además de tres desaparecidos aún), muchas de las cuales perecieron antes de que fuera decretada la emergencia por parte del CECOPI (Centro de Coordinación Operativa Integrado), lo cual se produjo a las 20h11’, cuando los mayores datos de la crecida de las aguas, se contabilizaron sobre las 18h, momento en el que el caudal del barranco del Poyo llegó a los 1.725,89 m3 por segundo, con los avisos por alerta hidrológica repitiéndose, constantemente, desde las primeras horas de ese mismo día.
“Aquí seguimos esperando. Llevamos más de una hora de reflexión”. “Falta liderazgo no solo en esa reunión sino en las siguientes a las que asistí” (José Ángel Núñez Mora, responsable de AEMET en la Comunidad Valenciana)
¿Qué más cosas tendrían que ocurrir para que la primera autoridad autonómica, representante del Estado en la Comunidad de Valencia, estuviera, presente, al mando de la gestión de la crisis?. Antes de dar respuesta a esa pregunta hay que reseñar que el presidente en ejercicio, el señor Carlos Mazón, no consideró oportuno variar su agenda y más allá de la información aportada sobre un almuerzo en un restaurante, ya célebre, llamado ‘El Ventorro’, con la periodista Maribel Vilaplana, que, al parecer se extendió durante tres horas, desde las 15h a las 18h, pero que condicionó que la llegada del presidente autonómico al CECOPI, centro de mando de la situación de crisis, no se produjera hasta las 20h28’, según las últimas manifestaciones, y puntualizaciones, realizadas por el Sr. Mazón el pasado 26 de febrero, modificando otras anteriores en las que indicaba que había llegado poco después de las 19h30’, con anterioridad al lanzamiento de alerta, lo cual ratifican los servicios informativos de la radio y televisión publica, entrando en contradicción con la última versión dada por el protagonista. Quizás el cambio en la concreción horaria de su llegada, tenga más que ver con una defensa judicial, que con un argumento para la diatriba política.
”No entiendo lo del cambio de versión. Evidentemente las 20h28’ son después de las siete y media” (Carlos Mazón, ante los medios de prensa el 26/febrero/2025)
Pero a estas alturas, tras lo sucedido y lo que se va conociendo sobre esas horas trágicas y, evidentemente, mal gestionadas, se ha difundido el testimonio del responsable de la AEMET en la Comunidad Valenciana, José Ángel Núñez Mora, quien describió como un desastre organizativo todo lo vivido en aquella reunión, la cual se llegó a paralizar durante una hora (entre 18h00’ y 18h58’) sobre lo que compartió una WhatsApp con sus compañeros con la frase literal de “Aquí seguimos esperando. Llevamos más de una hora de reflexión”. Afirmando, al volver la vista atrás, que lo que hubo fue “Falta de liderazgo no solo en esa reunión sino en las siguientes a las que asistí”.
«Casi todos podemos soportar la adversidad, pero si queréis probar el carácter de un hombre, dadle poder» (Abraham Lincoln)
El desempeño del poder exige liderazgo, y las situaciones complicadas son la ‘prueba del algodón’, como si de un rubicón se tratase, para acreditar si se tiene la capacidad para ejercerlo o no, como muy bien expresa la conocida frase de Abraham Lincoln de «Casi todos podemos soportar la adversidad, pero si queréis probar el carácter de un hombre, dadle poder». Muchas personas son atraídas por la política en base a sus oropeles, en forma de privilegios (dinero, prebendas, acceso a pensiones máximas con unos solos meses de ejercicio del cargo público, etc…) pero muy pocos son los dotados de la capacidad necesaria para los cargos a los que acceden tras la ‘fontanería’ de sus respectivos partidos.
“De error en error toda la verdad sale a la luz” (Sigmund Freud)
En solo cuatro meses, varios han sido los cambios de relato ofrecidos por el actual presidente autónomo de Valencia y darían para escribir, si no un libro, sí un amplio ensayo sobre el genero humano, sus ambiciones y sus motivaciones. Con cada nueva matización que varía la realizada días o semanas atrás por parte del Sr. Mazón, me viene a la memoria la reflexión del neurólogo, estudioso de la psicología y padre del psicoanálisis, Sigmund Freud quien afirmaba que “De error en error toda la verdad sale a la luz” y quizás en el caso que nos ocupa se cumpla su razonamiento. Esperemos.
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