Alarde de tonadilla, crítica teatral
03 Dic 2018
Pocas veces un título hace tanta justicia a la obra que nombra, como esta ocasión en la que como bien señala el autor, opta por utilizar la palabra “tonadilla”, y no copla, “por ser pariente y participe de las tonadas que contienen el cante grande, espeluznante y conmovedor, de tan difícil ejecución, el lirismo más profundo”. Es un verdadero alarde, de la tonadilla desde luego, pero también desde el punto de vista artístico, histórico y, hasta, antropológico.
“Yo soy esa, la que miente cuando besa”
Hugo Pérez de la Pica nos vuelve a demostrar su capacidad creativa y sus dotes para diferentes roles, destacando su dramaturgia y una original concepción para engendrar espectáculos teatrales diferentes, con unas señas de identidad absolutamente propias y reconocibles, que a fuerza de ser tales, parecen constituirse en una resistencia a contra corriente de las tendencias hoy mayoritarias, convirtiéndose en una «rara avis” que debería ser protegida y preservada.
“Alarde de tonadilla” es un espectáculo que integra más de treinta temas que recorren, a través de sus notas, la historia del teatro musical español, desde “Russignol” a “Suspiros de España”, de “Amapolas y Espigas” a “Esperanza Macarena”, de “Verde Limón” a “Antonio Vargas Heredia”, de “Tres morillas” a “Las cigarreras”, uniendo en el recorrido los talentos de Pablo Guerrero, Antonio Quintero, Rafael de León, Manuel Quiroga, Genaro Monreal, Juan Mostazo o Federico Chueca, pero es mucho más que eso, porque en su propia construcción encierra una trama que queda hilada a través de los versos originales, creados para la ocasión por Hugo Pérez de la Pica, a los que pone voz José Luis Sanz.
“Tres morillas me enamoran en Jaén, Axa, Fátima y Marién”
El elenco formado por Candelaria de la Serena, Raquel Valencia, Helena Amado, Badia Albayati, Alberto Arcos y Ana Peiró interpretan magníficamente los temas elegidos en el repertorio por Pérez de la Pica, con sus estupendas voces, unas veces como solistas, otras en duos o trios, pero también formando coros los unos de los otros, y éstos de aquellos; cantan, taconean, hacen sonar las palmas, los palillos o las castañuelas, con total desenvoltura, conectando a los espectadores con unos sonidos anidados en su propio recuerdo, que no tardan en aflorar, en un ejercicio de sana antropología.
La escenografía, responsabilidad de Santiago Martinez Peral, y la coreografía (Juan Mata, Raquel Valencia, Alberto Arcos y Hugo Pérez de la Pica) logran optimizar al máximo las posibilidades del espacio escénico disponible, haciendo original y distinta cada una de las recreaciones elegidas según el tema. Destacando el rico vestuario, bellísimo, creado por el propio director y realizado por Milagros Sánchez, Concha Morillas, Carmen Rodriguez de la Pica y Carmen Bravo. Sin olvidarnos de una óptima iluminación (Hugo Pérez de la Pica y Miguel Pérez-Múñoz) que consigue transportarnos en un viaje en el tiempo.
“Con un clavel grana temblando en la boca, con una varita de mimbre en la mano, por una verea que llega hasta el rio, iba Antonio Vargas Heredia, el gitano»
El espectáculo construido por Hugo Pérez de la Pica, que se exhibe los domingos en el Teatro Tribueñe, es una verdadera joya para todo aficionado a las artes escénicas, repleto de calidad, pero sobre todo realizado con mucho talento y pasión, merecedor de la máxima difusión y con todos los requisitos necesarios para poder ser representado, por ejemplo, en el Teatro de la Zarzuela o espacios escénicos similares. El día que asistimos a la representación de “Alarde de tonadilla” no quedaba ni un hueco libre entre el público y ese reconocimiento es la justa recompensa al cariño, gusto exquisito y mérito desde los que está concebido. Un valioso tesoro para ser descubierto.
Un espectáculo que te transporta al cante popular, al cante que escuchábamos de niños en los pueblos de España y muy especialmente en los de Andalucía
Grandes la dirección, los cantantes y bailarinas, grande la guitarra y la poesía, pero quiero destacar especialmente a una de las participantes en el espectáculo que permanece en la sombra a lo largo del mismo, me refiero a la figura extraordinaria de Tatiana Studyenova al piano que en mi opinión es clave en el desarrollo de la función
Muchas gracias, Roberto, por su participación y comentario en http://www.traslamascra.com/category/teatro, al hilo de la crítica teatral publicada sobre el espectáculo «Alarde de tonadilla». Coincido con usted en su apreciación positiva para esta propuesta creada desde el sugerente espacio que es Teatro Tribueñe, de la mano de Hugo Pérez de la Pica. Esperamos seguir contando con sus aportaciones en el futuro. Saludos.